Alimentos buenos despues de un infarto

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No hay nada como la actividad física para mantener el corazón fuerte, y esto es especialmente cierto en el caso del ejercicio después de un ataque al corazón. Según la Asociación Americana del Corazón (AHA), las personas que hacen ejercicio con regularidad después de sufrir un infarto, además de dar otros pasos para mejorar la salud del corazón, pueden vivir más tiempo y disfrutar de una mejor calidad de vida.

Mantenerse activo todos los días es fundamental para tener un corazón sano. El ejercicio aeróbico -caminar, correr, nadar o montar en bicicleta y similares- ayuda a mantener el corazón fuerte. Los ejercicios de fuerza aumentan la resistencia y los estiramientos la flexibilidad.

Puede ser útil aprovechar la rehabilitación cardíaca si está disponible como parte de su plan de tratamiento. Según la Clínica Mayo, la rehabilitación cardíaca es un programa de supervisión médica diseñado para ayudarle a recuperarse después de un ataque cardíaco. Este programa, de tres a seis meses de duración, le enseñará a empezar a hacer ejercicio de forma segura después de un ataque al corazón y a tomar otras medidas para prevenir otro episodio cardíaco. Es posible que haya recibido una derivación a la rehabilitación cardíaca cuando le dieron el alta del hospital. Si no lo hizo, puede pedir a su médico más información sobre sus opciones.

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El riesgo de infarto ya no se basa en la edad. En los últimos 20 años, se ha producido un aumento de los infartos entre los menores de 40 años. Entre 2006 y 2016, los infartos en este grupo de edad han aumentado un 2% cada año. El modo de vida moderno y sus consecuencias, como la disminución de las comidas caseras, el consumo de más alimentos procesados, la falta de actividad física, el estrés crónico no atendido, la obesidad y las deficiencias de micronutrientes son algunos de los principales factores que contribuyen a ello. Además, la mayoría de la gente desconoce sus niveles de glucosa, presión arterial y colesterol, todos ellos factores importantes que determinan la salud del corazón.

El papel de la dieta en la prevención de los infartos u otras enfermedades cardiovasculares está bien documentado. Numerosas estrategias han sido desarrolladas por instituciones y expertos. Pero, ¿qué ocurre si ya se ha sufrido un infarto? La recuperación puede ser un proceso largo y arduo. La rehabilitación puede durar entre semanas y tres meses, dependiendo de la gravedad, el tiempo de tratamiento y los cuidados posteriores.

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Cambiar la forma de comer después de un ataque al corazón puede resultar desalentador. Aprender y adoptar un nuevo estilo de vida después de un momento tan traumático es difícil, pero es necesario para garantizar que se mantenga sano. He aquí algunos consejos que le ayudarán a llevar un estilo de vida más saludable para que su corazón siga latiendo con fuerza.

Demasiado líquido después de un infarto puede hacer que su corazón trabaje más de lo que debería. También puede provocar falta de apetito y dificultad para respirar. Su médico le indicará la cantidad de líquido que debe tomar al día.

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Si ya tiene una EAC, quizá se pregunte qué tipo de dieta podría favorecer su salud cardíaca. ¿Qué alimentos debe elegir (o evitar) si ha sufrido un infarto de miocardio (ataque al corazón), un accidente cerebrovascular, un síndrome coronario agudo o una angina de pecho?

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Un ejemplo es el ensayo PREDIMED de 2018. El estudio comparó dos versiones de la dieta mediterránea con una dieta simple baja en grasas (el tipo de dieta que se ha recomendado para las personas con EAC en los últimos 25 años).

En la segunda parte participaron 30.000 personas de 55 años o más. Cada persona tenía EAC o diabetes con complicaciones cardiovasculares. Los participantes se agruparon según sus hábitos alimentarios. Los investigadores siguieron a cada grupo durante una media de 56 meses.

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