Nutrientes
Contenidos
A medida que te haces mayor, puedes empezar a tomar tus propias decisiones sobre muchas de las cosas que más te importan. Puede que elijas tu propia ropa, música y amigos. También puedes estar preparado para tomar decisiones sobre tu cuerpo y tu salud.
Tu cuerpo necesita energía para funcionar y crecer. Las calorías de los alimentos y las bebidas te dan esa energía. Piensa en los alimentos como energía para cargar tu batería durante el día. A lo largo del día, utilizas la energía de la batería para pensar y moverte, por lo que necesitas comer y beber para mantenerte activo. Equilibrar la energía que tomas a través de los alimentos y las bebidas con la energía que utilizas para el crecimiento, la actividad y la vida diaria se llama “equilibrio energético”. El equilibrio energético puede ayudarte a mantener un peso saludable.
Cada persona necesita una cantidad diferente de calorías para estar activa o mantener un peso saludable. La cantidad de calorías que necesitas depende de si eres hombre o mujer, de tus genes, de tu edad, de tu altura y peso, de si sigues creciendo y de tu grado de actividad, que puede no ser el mismo todos los días.
Nutrición saludable
Jo-Anna B. Baxter no trabaja, asesora, posee acciones ni recibe financiación de ninguna empresa u organización que pueda beneficiarse de este artículo, y no ha revelado ninguna afiliación relevante más allá de su nombramiento académico.
Se calcula que en todo el mundo hay 1.200 millones de adolescentes de entre 10 y 19 años. Aunque la adolescencia se sitúa entre la infancia y la edad adulta, los adolescentes no son ni niños grandes ni adultos pequeños. Tienen mayores necesidades alimentarias para apoyar su rápido crecimiento físico y su maduración.
El fuerte aumento de problemas como la anemia, el sobrepeso y la obesidad en este grupo de edad sitúa los problemas nutricionales entre las mayores amenazas inmediatas para la salud de los adolescentes. La exposición a una nutrición sana desde la adolescencia -desde el consumo real de alimentos hasta el entorno alimentario- puede sentar las bases para una vida sana en el futuro y unos buenos hábitos alimentarios.
Los factores combinados que conforman la dieta pueden incluir factores personales, como las preferencias de sabor y el conocimiento de los alimentos saludables; influencias sociales como los amigos, las familias y los compañeros de trabajo; y el entorno físico, incluidas las tiendas y la publicidad.
La forma en que me mantengo sano y activo
Introducción La adolescencia es un periodo de rápido crecimiento y metabolismo. En esta etapa, los adolescentes tienen mucho interés en su desarrollo físico y emocional y sus necesidades nutricionales son mayores que las de los hombres y mujeres adultos, con las correspondientes mayores cantidades de vitaminas y minerales. Estos aumentos son para satisfacer las mayores necesidades de nutrientes causadas por el estirón de la adolescencia.
Durante la adolescencia hay una gran susceptibilidad a las deficiencias nutricionales y a los malos hábitos alimentarios. Esto puede provocar problemas más adelante en la vida, como osteoporosis, obesidad, hiperlipedemia, retrasos en la maduración sexual y en la estatura final del adulto. El desarrollo de trastornos alimentarios también es prominente durante esta época. Los trastornos alimentarios son comunes entre los adolescentes, cuyas elecciones alimentarias están influidas por las presiones de la sociedad para tener el aspecto ideal. Algunos trastornos alimentarios se clasifican como anorexia, bulimia, sobrealimentación compulsiva o atracones. Tanto la anorexia como la bulimia pueden provocar convulsiones, insuficiencia renal, latidos irregulares del corazón, osteoporosis y erosión dental. Los adolescentes que padecen un trastorno de sobrealimentación compulsiva corren el riesgo de sufrir un ataque al corazón, hipertensión arterial y colesterol alto, enfermedades renales, artritis y derrames cerebrales.
Estilo de vida saludable para el adolescente
La adolescencia es un periodo importante de crecimiento físico y maduración sexual. La nutrición, que es un determinante importante del crecimiento físico de los adolescentes, es un área importante a la que hay que prestar atención. El retraso del crecimiento es uno de los problemas de salud más importantes para los adolescentes y sus padres, así como para el personal sanitario.
Una ingesta nutricional inadecuada durante la adolescencia puede tener graves consecuencias a lo largo de los años reproductivos y más allá. Una nutrición deficiente durante la adolescencia puede mermar la capacidad de trabajo y la productividad de los chicos y chicas adolescentes en sus años posteriores. Además, una chica desnutrida corre el riesgo de desarrollar complicaciones durante el embarazo y las probabilidades de dar a luz a un bebé de bajo peso aumentan, perpetuando así un círculo vicioso de desnutrición y mala salud.
Una dieta equilibrada es aquella que proporciona todos los nutrientes (hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales) en las cantidades y proporciones necesarias para mantener la salud y el bienestar general y que, además, hace una pequeña provisión de nutrientes adicionales para resistir la escasez de corta duración. Se puede conseguir mediante una mezcla de cuatro grupos básicos de alimentos, es decir, hidratos de carbono, proteínas, grasas, vitaminas y minerales. Como estos están presentes en diferentes tipos de alimentos como los dals, el chapati o el arroz, las verduras verdes, las frutas fáciles de conseguir y la leche, es importante consumir estos alimentos en la combinación adecuada todos los días.